Enseñanzas de JHESU en el Evangelio Esenio de la Paz.

Jesús
• En verdad os digo, aquellos que participan y contemplan las ganancias que se obtienen lastimando a una
de las inocentes criaturas de Dios, no pueden ser justos, más aún, tampoco les es permitido tocar las cosas
sagradas, o incluso acercarse a la mesa del Señor, ni pueden enseñar los misterios del Reino. Pues os digo
que aquellos cuyas manos están manchadas con sangre, o cuyas bocas están contaminadas con la carne
de criaturas inocentes, no son dignos de la vida en este mundo ni en el mundo venidero.
El Evangelio Esenio de la Paz

• 'No matarás', pues Dios da a todos la vida, y lo que Dios ha dado no debe el hombre arrebatarlo.
Pues en verdad os digo que de una misma Madre procede cuanto vive sobre la tierra. Por tanto quien mata,
mata a su hermano. (…) Y la carne de los animales muertos en su cuerpo se convertirá en su propia tumba.
Pues en verdad os digo que quien mata se mata a sí mismo, y quien come la carne de animales muertos
come del cuerpo de la muerte.
El Evangelio Esenio de la Paz


• NO MATÉIS, NI COMÁIS LA CARNE DE VUESTRA INOCENTE PRESA, no sea que os convirtáis en
esclavos de Satán. Pues ese es el camino de los sufrimientos y conduce a la muerte. (…) Obedeced,
por tanto, las palabras de Dios: "Mirad, os he dado toda hierba que lleva semilla, sobre la faz de toda la tierra,
y todo árbol, en el que se halla el fruto de una semilla que dará el árbol. Este será vuestro alimento".
El Evangelio Esenio de la Paz


• Quien mata al animal sin causa alguna, sin que éste le ataque, por el deseo de matar, O POR SU CARNE,
o porque se oculta, o incluso por sus colmillos, malvada es la acción que comete, pues él mismo se convierte
en bestia salvaje. Y POR TANTO SU FIN HA DE SER TAMBIÉN COMO EL FIN DE LOS ANIMALES SALVAJES.
El Evangelio Esenio de la Paz